Me vi con los pies descalzos,
y la puerta se cerró
como se abrió la otra,
como se besan los caracoles:
despacito y suave.
Compadres. Compadre. Comadres. Comadre.
Gracias.
"Muchachas que algún día leáis emocionadas estos versos y soñéis con un poeta, sabed que yo los hice para una como vosotras, y que fue en vano" -Ernesto Cardenal
jueves, noviembre 22, 2012
miércoles, noviembre 21, 2012
CERRADO POR DERRIBO
El autor ha escuchado.
Ha visto.
Y ha sentido
a la Bestia.
El autor se ha dado cuenta de que este blog ya no sirve. Para nada.
Nació hace 2 años, tras el Gran Estampido. Fue engendrado con el propósito de no explotar delante de ti, de lamerse las heridas a él mismo, de formar con gravilla de lágrimas cristalizadas una dimensión paralela en la que tú eres posible, y así no morir ahogado por las plantas carnívoras gigantes de la realidad. Pero, sin él ser consciente, estaba criando a una melancolía animal en cueros, una actitud que, pese a los intentos de evitarlo, acabó siendo (efectivamente) anormal e indebida hacia el vacío que supones. El autor ha comprendido que, por mucho que quiera, no tiene derecho, ni lo tendrá, a pedir nada a cambio de nada.
Pero además ha surgido un problema.
A estas alturas, esa melancolía animal se ha convertido en una bestia sórdida, y el autor se considera incapaz de mantener con vida a una mutación cardiovascular de ese calibre durante más tiempo.
El motivo de esta incapacidad es el hecho de que esta criatura inmunda que ha crecido sobre las paredes del estómago del autor no solo lo está devorando entero como un cáncer, consumiéndolo y chupándole en los ojos, sino que quiere empezar su metástasis interpersonal para intentar devorar más cuerpos completamente inocentes.
El autor no considera esto aceptable de ninguna de las maneras, pues uno de los motivos que cimentaron esta cajita de bytes fue evitar la difusión de este Leviatán, Medusa, o Kraken si quieres, de tristeza pura. El autor promete que siempre vomitó aquí para intentar no manchar. Pero manchó. Y esto, créanme, le tiene a muy mal traer. Él no quiere ser así.
Este blog, substancia de Masa calentorra, viscosa y negra, no puede seguir siendo mantenida ni contenida, y el autor sólo ve como solución, que se proceda a su LIQUIDACIÓN POR CIERRE. Matar al centauro de mierda de un solo ojo.
Sin embargo, el autor no contempla destruir el tener en mucho a (el amor por) la despensa infinita, indestructible y dura como el diamante, de comida del monstruo (y mía): Tú.
Principalmente porque el diamante no se puede ni rayar, por mucho que quiera uno y lo pase por cien mil cuchillos y navajas. El autor. . . fue incapaz de hacer más grandes aquellas LETRAS, y no se pueden borrar, porque lo rojo de aquella pared no era tomate.
Pueden ustedes tomar por suyo a cualquiera de las hijas bastardas que son las entradas de este blog. Lo que consideren. Sin excepción. Pueden anotarse como autor de ellos (bajo su responsabilidad y riesgo), pues cada letra de esta masa lleva innumerables y microscópicas semillas de esta Bestia terrible y asesina.
La liquidación por cierre concluirá en 9 días, en los que el autor tendrá muy a bien reflexionar, mirándole a los ojos a la Bestia, a la Masa, (ahora sí, muertas) y a las cosas que no se puedan destruir:
buscarle sentido
al seguido
del punto
del fin.
Ha visto.
Y ha sentido
a la Bestia.
El autor se ha dado cuenta de que este blog ya no sirve. Para nada.
Nació hace 2 años, tras el Gran Estampido. Fue engendrado con el propósito de no explotar delante de ti, de lamerse las heridas a él mismo, de formar con gravilla de lágrimas cristalizadas una dimensión paralela en la que tú eres posible, y así no morir ahogado por las plantas carnívoras gigantes de la realidad. Pero, sin él ser consciente, estaba criando a una melancolía animal en cueros, una actitud que, pese a los intentos de evitarlo, acabó siendo (efectivamente) anormal e indebida hacia el vacío que supones. El autor ha comprendido que, por mucho que quiera, no tiene derecho, ni lo tendrá, a pedir nada a cambio de nada.
Pero además ha surgido un problema.
A estas alturas, esa melancolía animal se ha convertido en una bestia sórdida, y el autor se considera incapaz de mantener con vida a una mutación cardiovascular de ese calibre durante más tiempo.
El motivo de esta incapacidad es el hecho de que esta criatura inmunda que ha crecido sobre las paredes del estómago del autor no solo lo está devorando entero como un cáncer, consumiéndolo y chupándole en los ojos, sino que quiere empezar su metástasis interpersonal para intentar devorar más cuerpos completamente inocentes.
El autor no considera esto aceptable de ninguna de las maneras, pues uno de los motivos que cimentaron esta cajita de bytes fue evitar la difusión de este Leviatán, Medusa, o Kraken si quieres, de tristeza pura. El autor promete que siempre vomitó aquí para intentar no manchar. Pero manchó. Y esto, créanme, le tiene a muy mal traer. Él no quiere ser así.
Este blog, substancia de Masa calentorra, viscosa y negra, no puede seguir siendo mantenida ni contenida, y el autor sólo ve como solución, que se proceda a su LIQUIDACIÓN POR CIERRE. Matar al centauro de mierda de un solo ojo.
Sin embargo, el autor no contempla destruir el tener en mucho a (el amor por) la despensa infinita, indestructible y dura como el diamante, de comida del monstruo (y mía): Tú.
Principalmente porque el diamante no se puede ni rayar, por mucho que quiera uno y lo pase por cien mil cuchillos y navajas. El autor. . . fue incapaz de hacer más grandes aquellas LETRAS, y no se pueden borrar, porque lo rojo de aquella pared no era tomate.
Pueden ustedes tomar por suyo a cualquiera de las hijas bastardas que son las entradas de este blog. Lo que consideren. Sin excepción. Pueden anotarse como autor de ellos (bajo su responsabilidad y riesgo), pues cada letra de esta masa lleva innumerables y microscópicas semillas de esta Bestia terrible y asesina.
La liquidación por cierre concluirá en 9 días, en los que el autor tendrá muy a bien reflexionar, mirándole a los ojos a la Bestia, a la Masa, (ahora sí, muertas) y a las cosas que no se puedan destruir:
buscarle sentido
al seguido
del punto
del fin.
domingo, noviembre 18, 2012
Romance De Las Escobas.
La noche está cojeando.
La carretera está coja.
La pintura hace abalorios
en su pupitre de sombras.
La pared vuelve a dormirse
soñando con dos pistolas.
Dos mil castillos de naipes
llevaban puesto en las botas:
“La Casa
del Agua se llama
la Casa de las Escobas.”
Por la calle caminando
subió un pulmón de coronas.
Se ve a contraluz que dentro
tiene virutas de goma.
Un hombre. Dos hombros rotos.
Tres toneladas de roca.
Montaña de cicatrices
como una reunión de sombras.
Por el mismo portal opaco
el humo movió la cola
la pintura se hizo un nudo
de venas en las baldosas.
La noche empezó a girar
como un taladro de moscas
y el humo pregunta ¿Cómo
huele así? ¿Por qué a estas horas?
-Amigo, se está quemando
amor en mis
cacerolas,
jirones de agua
caliente
zumo negro de bellota.
-De pie. Por tus muertos, grita,
subido por las farolas
a los mismos hongos verdes
la sangre que te resopla.
Guillermo, vuelve a llamar,
vuelve a encararte a las olas.
Tus pestañas en la mano
y el corazón en la boca.
-Pero ¿Qué corazón arrastro?
¿Que corazón y qué boca?
mis rodillas destrozadas
parece que se me borran.
No quiero arrastrarme, humo
me estoy quedando sin forma
machacado en tu almirez
con todas las nebulosas.
Humo, tú deja que marche
mi procesión de neuronas
mi vals ridículo y torpe
mi pasodoble sin ropa.
Humo, déjame bailar
un tango con las gaviotas.
Solo como
siempre, solo
como nunca
y ella sola.
sábado, noviembre 10, 2012
Redundancia.
Mi caballo de madera destrozado
por las brújulas
que huelen a pan y a esqueleto
que apuntan al mismo
Norte seco que las tuyas.
A la misma cocina
desierta, a la misma goma
oscura, a la misma oficina,
y a la misma canción de muletas.
Aquí hay un silencio que no bebe lenguas
Ni más sal ni nescafé.
Ni los vientos por putas pequeñas.
Miras otra vez.
Y se me vuelven a saltar los plomos.
Vivo entre paréntesis
En una sucesión de sonidos de desastre
de unas lágrimas marrones (las mías)
que boquean por otras azules (las tuyas).
Que como nosotros, de tan ser diferentes,
ya casi son iguales.
Cantos a capas capeando temporales
que también nos capean a nosotros.
Pedruscos de pelo seco y pies encharcados,
cerebro empapelado y piel dura, dura y blanda.
Que sabemos vivir solos.
Valga la redundancia.
viernes, octubre 26, 2012
Las Olas.
Me han dicho que come personas.
Me han dicho que se unta de plástico
Para que le resbalen por los lados
Los gritos
Las cremalleras
Los portazos
Y las cámaras de gas.
Me han dicho que de blanda, es dura
Y así que no se despeina
al trotar.
Me han dicho
Que
nunca se ha corrido
con
el ruido del gentío
y
su existir.
Me han dicho
Que por existir funde cadenas
y herraduras.
Que, tal que la de las olas,
La tuya
No está mojada
Ni lo va a estar nunca
Porque es ella la que moja.
lunes, octubre 15, 2012
Mi lengua con marcas de dientes.
Por ti estoy roncando
Enfangado en tu barro que está
Relinchando por verme volar
Orinándome encima del hielo.
Tapando en silencio
Esta boca por no gotear
Queroseno de pena al tragar
Una lengua cosida a mordiscos.
Infecta de alambres de
Espino con cal y a seguir
Rebañando, y si empieza a morir,
Ordeñarle los grifos al tiempo.
domingo, octubre 07, 2012
Mi cráneo.
De vuestras canciones de mierda me río yo.
De vuestro amor de mierda y de vuestros polvos de mierda.
De vuestras dudas existenciales de domingo por la tarde,
y de vuestra puta de manía de
reíros de todo.
De vuestras vidas, sociedad de
mierda, me río yo.
Porque he visto a la razón llorando
pedirme piedad de rodillas.
Porque he visto como la poesía
que va forrando mi cenicero
se ha cansado del trapo pegado a la nariz.
Como se ha cansado de veros
masticar mis venas
purulentas que parecen tripas.
Llenas de carne podrida,
de frases podridas,
y de tampones podridos.
Ojalá que os revienten todos en la boca.
Corazones que descosen como descosen
los que saben que no saben descoser.
Me basto solo para apuntalar mi cráneo
Con las vigas de un portaminas
Con mis ganas infinitas de que llueva
hielo derretido en un pedazo de papel.
Que de tan mojado se hunda.
Que se ahogue jugando un "yo nunca"
con las tornas
de
mi
corazón.
También podrido.
Pero no muerto.
domingo, junio 10, 2012
Carátula de las cosas que tengo.
Tengo un pijama, un papel.
Tengo un poema, un prospecto
Un saco de ideas, un gueto.
Tengo un bloc del cabaret.
Tengo astillas en los pies.
Cerillas entre los huesos.
Azufre y un flato en los dedos
y un calambre en cada sien.
Tener…
¿Tú sabes qué tienes?
Yo tengo tendencia a caer
por espirales deformes
en parábolas miopes
al grito de “volveré”.
Tengo gomas, bolis Bic,
Folios, tijeras… babeos,
aguarrás y dos tinteros
que siempre preguntan por ti.
Tengo...
No sé para qué, pero tengo.
Tengo huecos, acidez,
Dedos, pajas y gemidos,
cabezazos y pestillos,
y pintura en la pared.
Tengo vértebras, hollín,
perfil de ratón perdido
trasnochado y escondido
detrás de mi cicatriz.
Tuve prisa por salir
De aquel duelo de plomo y ruido
porque a este soldadito
le han robado su fusil.
Enfin… ¿Yo qué tengo? Nada.
Sólo tengo que fingir.
Fingir que mañana, sin falta,
Empiezo a olvidarme de ti.
viernes, febrero 24, 2012
Esto es lo que pienso de tu principal
A Tuenti.
(Aludidos: leer dos veces.)
Te
avisó
Atornilla
las bisagras
Y
apuntálate las bragas
que
llegó
mi
poema (mi muleta)
como
un tiro de escopeta
al
corazón,
escondido
en los latidos
de
estas letras y crujidos,
coalición
de talón y lapicero
de insultos y pedimento
un
complot
de tu cabeza y las teclas,
chat, perfiles
y cortezas
y
un tablón.
Vaya
guerra de cuchillas
¿a quién coño le dedicas
la
canción?
no
me digas que “¿yo? A nadie”
que
las clavas como sables
sin
condón.
Tuenti
es un impresionismo:
Depresiones
de domingo
Y
de cartón.
Tuenti
crece con la rabia
y
comentarios con escuadra
y
cartabón,
que
hacen ángulos y esquinas
de
esta jungla de pupilas
y
carbón.
Yo
nos lamo las heridas
de
tus finas ironías
de
león
para
untarnos los cimientos
que
andan faltos de cemento
y
hormigón.
martes, febrero 21, 2012
Un cuento triste
En la hoja sólo estaba escrito eso:
"Un cuento triste"
Después de mirarlo unos segundos, dijo:
-Esto no es un cuento triste.... más bien es un cuento estúpido.
-Por eso es triste.-Respondió.
martes, enero 24, 2012
Payaso.
Sábado, 23:34, Madrid. Además de la
lluvia, el frío de invierno se había instalado en la capital aquellos días. “El
Circo de Viena”, uno de los muchos circos que visitan la periferia cada año,
acababa de terminar cuando un hombre con zapatos de cuero italiano, sombrero
calado y gabardina apareció caminando lentamente bajo la luz de las farolas. No
llevaba ni un paraguas, y con la que estaba cayendo, las aceras encharcadas
hicieron lo propio con los zapatos de cuero. Podía llegar a parecer que los
fenómenos meteorológicos le eran algo ajeno. Su nombre era Antonio Durán.
Caminaba hacia las instalaciones del
circo, y llegó cuando los chavales empezaban a recoger todas y cada una de las
cosas. Las carpas ya no colgaban a quince metros, y os animales, acrobacias,
las risas, gritos, caras sorprendidas y algún que otro beso parecían ya a meses
de distancia. Antonio caminó entre carpas, cuerdas y jaulas, hasta que al final encontró el
camerino de los payasos.
Buscaba a “Rocambole”, uno de los 10
payasos que formaban parte del circo. Llamó sin prisa a la puerta, nadie por
allí conocía su nombre. El payaso abrió la puerta, y con los ojos como platos y
faltándole el aliento, se hizo a un lado de la puerta.
Durán entró en la habitación sin
ventanas ni decoración, con el payaso mirándole igual que a un fantasma. Se
quitó el sombrero empapado, y sacó con calma un pequeño revólver Colt 32 del
bolsillo de la chaqueta. Rocambole ni siquiera se movió cuando vio el arma
relucir bajo los focos de neón.
Los chavales que estaban recogiendo
ignoraron la detonación apagada que llegó desde el cuarto de los payasos,
“cosas de Rocambole”, debieron pensar.
Todavía con los oídos pitando y el fogonazo en
la retina, Durán cerró los ojos un momento, seguramente pensando en la que se
le venía encima. Se oyó entonces el sonido ronco del motor de una vieja moto
americana. En aquel momento supo que había cometido un error.
jueves, enero 12, 2012
Romance de la Guerra Civil
Cada charco
y cementerio
multiplicaba
sus puertas.
Hoy viejas
fotos preguntan
el porqué de
aquella guerra.
Herida
abierta en el suelo,
enterrando
cuerpos cuenta
cada vida que
termina
al compás de
sus trompetas.
Los soldados
desfilando
custodiaban
a las presas.
Largo y quieto
aquel silencio
en las tapias
de Las Ventas.
Dan la orden
de detenerse
y de repente
se dan cuenta
que aunque
es injusto las matan,
que en vez de un beso, unas rejas.
que en vez de un beso, unas rejas.
Pero el
tiempo se detuvo
agachado en
las cunetas.
Las miradas
que asesinan
armas sordas,
cruces negras.
En sus
casas, otro grito,
trece madres
descompuestas
por un tiro
escalofrío
que hace
llorar de impotencia.
Tercos fusiles agudos
en la madrugada suenan
en un aire donde estallan
rosas de pólvora negra.
La triste y
dura la descarga
para siempre
las congela.
Dejó unas
letras fugaces
y una lágrima en la arena.
Ahora ya
nadie se acuerda
de esas
balas y esa guerra.
Ni del eco
de los gritos,
ni del ruido
de escopetas.
A todos los que perdieron la guerra.
A cada una de las 13 Rosas.
Por vuestros muertos.
Por los nuestros.
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